Muchos de los que esperan el rapto están llenos de ansiedad al ver que el sistema de la bestia se fortalece decididamente y está a punto de ejercer el poder universal del Anticristo en todo el mundo a través del control de la salud mundial, la manipulación del dinero y la destrucción de la soberanía nacional y de los controles y equilibrios gubernamentales que antes frenaban la marea de la corrupción. ¿Hay todavía esperanza de un rapto, y si es así, por cuánto tiempo?
En el libro del Apocalipsis, Dios identifica el poder que controla el sistema de la bestia. El poder controlador no es la bestia en sí, sino una mujer que monta (o controla las riendas) de la bestia:
Y me llevó en el Espíritu al desierto; y vi a una mujer sentada sobre una bestia escarlata llena de nombres de blasfemia, que tenía siete cabezas y diez cuernos. (Apocalipsis 17:3)
En este artículo, identificaremos a esta mujer—Babilonia la Grande—y examinaremos cómo ya ha caído según la profecía del capítulo 18, que describe la situación económica exacta que debe desarrollarse antes del rapto. Es una profecía tan clara que incluso un crítico puede asombrarse de cómo se ha cumplido.
¿Tienes sed del reino de justicia de Cristo? ¿Has cortado todos los lazos con Babilonia, como te instruye tu Señor? ¿Has mirado a los cielos y reconocido las señales de los tiempos? Si este es tu deseo, entonces permite que tu corazón se regocije, porque el reino eterno de Dios está cerca.
La primera mención de la caída de Babilonia—o para el caso, la primera mención de Babilonia en todo el libro del Apocalipsis, está en el mensaje del segundo ángel de Apocalipsis 14:
Otro ángel le siguió, diciendo: Ha caído, ha caído Babilonia, la gran ciudad, porque ha hecho beber a todas las naciones del vino del furor de su fornicación. (Apocalipsis 14:8)
En esta primera mención ya se destaca que su caída es doble. La segunda caída se describe en detalle en Apocalipsis 18, comenzando con “otro ángel” (comúnmente conocido como el “cuarto ángel”) que repite el mensaje del segundo ángel con detalles añadidos:
Después de esto vi a otro ángel descender del cielo con gran poder; y la tierra fue alumbrada con su gloria. Y clamó con voz potente, diciendo: Ha caído, ha caído la gran Babilonia, y se ha hecho habitación de demonios y guarida de todo espíritu inmundo, y albergue de toda ave inmunda y aborrecible. Porque todas las naciones han bebido del vino del furor de su fornicación; y los reyes de la tierra han fornicado con ella, y los mercaderes de la tierra se han enriquecido de la potencia de sus deleites. (Apocalipsis 18:1-3)
La caída de Babilonia está relacionada con el momento en que “todas las naciones han bebido”, cuando “todos los reyes de la tierra han fornicado con ella”. Las naciones y los reyes son actores clave—así como los mercaderes—que veremos de nuevo en el curso del capítulo.
El Señor llama a Su pueblo a salir de Babilonia para no ser partícipes de sus pecados. Hay algo que se llama “pecado corporativo” que simplemente significa que cada individuo tiene la responsabilidad de abordar el pecado en sus asociaciones—ya sea la familia, la iglesia o cualquier otra esfera—y hacer todo lo que esté en su poder para llevar a los individuos al camino correcto. Si uno no hace esto, es culpable de tolerar pecados que podrían haber sido abandonados. Si se hacen esfuerzos y el pecado es finalmente mantenido por la parte ofensora, entonces uno tiene la responsabilidad moral de alejarse de tal asociación como el acto final de testimonio contra el comportamiento pecaminoso. Esto puede significar renunciar a la membresía de la iglesia o desvincularse de los antiguos amigos con una declaración de la razón. Si uno no hace tales cambios, se convierte en culpable por asociación a los ojos de Dios, y cuando Dios castigue a los malvados, ese castigo también caerá sobre aquellos que permanecieron en asociación con los malvados cuando estaba en su poder hacer algo.
Y oí otra voz del cielo, que decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas; porque sus pecados han llegado hasta el cielo, y Dios se ha acordado de sus maldades. (Apocalipsis 18:4-5)
Además, el Señor que llama a Su pueblo a salir de Babilonia también le ordena a Su pueblo a pagarle a Babilonia, algo que no se puede hacer sin perjudicarse a sí mismo si se permanece en Babilonia:
Dadle a ella como ella os ha dado, y pagadle doble según sus obras; en el cáliz en que ella preparó bebida, preparadle a ella el doble. Cuanto ella se ha glorificado y ha vivido en deleites, tanto dadle de tormento y llanto; porque dice en su corazón: Yo estoy sentada como reina, y no soy viuda, y no veré llanto; (Apocalipsis 18:6-7)
La reina Isabel celebró recientemente el 70º año de su reinado, que relacionamos vagamente con esta profecía de la caída de Babilonia, pero hay que considerar un panorama más amplio. Como dijimos, la reina Isabel es sólo una figura que representa a Babilonia en parte debido a su papel como monarca de las naciones de la Mancomunidad, lo cual es significativo a la luz del hecho de que la “riqueza” de Babilonia es precisamente lo que es destruido en el curso de Apocalipsis 18. Sin embargo, ni la reina ni el Reino Unido ni la Mancomunidad es a lo que se refiere como “Babilonia” en el sentido profético del libro de Apocalipsis.
y en su frente un nombre escrito, un misterio: BABILONIA LA GRANDE, LA MADRE DE LAS RAMERAS Y DE LAS ABOMINACIONES DE LA TIERRA. (Apocalipsis 17:5)
En el simbolismo profético, Babilonia se define como “la madre de las rameras” o, en otras palabras, la mayor ramera espiritual de todos los tiempos. Además, la profecía es clara acerca de quién ha fornicado con ella:
Vino entonces uno de los siete ángeles que tenían las siete copas, y habló conmigo diciéndome: Ven acá, y te mostraré la sentencia contra la gran ramera, la que está sentada sobre muchas aguas; con la cual han fornicado los reyes de la tierra, y los moradores de la tierra se han embriagado con el vino de su fornicación. (Apocalipsis 17:1-2)
El simbolismo bíblico de estos versículos ha sido bien entendido desde la Reforma Protestante. Una mujer en la profecía (como la mujer en Apocalipsis 12, por ejemplo) representa a una iglesia, como todo cristiano del Nuevo Testamento sabe, incluso si no conectan completamente los puntos:
porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo, y él es su Salvador. (Efesios 5:23)
El hecho de que Cristo sea descrito en el papel de un esposo de la iglesia nos indica lo que significa la prostitución espiritual de Babilonia: la ramera representa a la iglesia que se ha alejado de Cristo y ha buscado su protección y apoyo en otra parte. Esto es exactamente lo que describe el Apocalipsis en el versículo 17:2 citado anteriormente: la gran ramera ha fornicado con “los reyes de la tierra”, lo que significa que es una iglesia que obtiene su poder, riquezas, influencia y protección del Estado.
A menos que alguien haya estado viviendo en una burbuja en los últimos años, es obvio cómo este escenario se ha desarrollado en el escenario mundial: tan pronto como el Papa Benedicto XVI se retiró y el Papa Francisco fue elegido, la prensa mundial fue repentinamente enamorada por los hechos “sin precedentes” de este nuevo papa carismático que prometió transformar la vieja y poco atractiva Iglesia Católica en una hermosa y moderna “mujer” que los poderes políticos podrían amar.
Y aquí es donde aparece el verdadero sentido del versículo 7 del capítulo 18, donde ella es descrita como una reina y no siendo viuda, porque el papado no siempre fue visto con tan buenos ojos. En los tiempos medievales, la Iglesia Católica tenía poder incluso sobre reyes y emperadores, pero no fue hace mucho—sólo en el año 1798—que el Papa Pío VI fue obligado a abandonar Roma, acabando así definitivamente con el poder estatal de la Iglesia Católica. Se convirtió en una viuda, sin protección alguna, ni de Dios ni de los hombres. No fue hasta el Tratado de Letrán de 1929 que la Iglesia recuperó la protección y el poder del Estado (siendo su único territorio las 44 hectáreas del Estado de la Ciudad del Vaticano). Así, la vieja ramera ganó al menos un cliente.
Pero lo que ha ocurrido en los últimos años es otra cosa. Con el nuevo enfoque del Papa Francisco, la iglesia se puso el maquillaje y el rimel para atraer a los reyes de todo el mundo a su trampa, y así pudo presumir de nuevo: “No soy viuda”. Llamó a todas sus hijas—las muchas iglesias antes protestantes que nunca abandonaron del todo sus perniciosos caminos—y la madre ramera utilizó a sus hijas para atraer a las naciones. ¿No recuerdas todos los acuerdos que firmó entre las distintas iglesias y religiones?[1]
¿Cuál fue exactamente el atractivo que utilizó para seducir a los reyes de la tierra? ¿No fueron declaraciones como “¿Quién soy yo para juzgar?” ¿No fue el retorcer las escrituras para aceptar los estilos de vida LGBT en las iglesias? ¡Esto es lo que hizo la amistad entre la iglesia y el mundo! Pero el yugo de su esclavitud aumentó aún más: las iglesias se vieron obligadas a tolerar también la punzada de la aguja de la vacunación, que el pontífice defiende con avidez.[2] La imagen más clara de esta prostitución de las iglesias puede verse nada menos que en la Iglesia Adventista del Séptimo Día, que celebró su Sesión de la Conferencia General del 6 al 11 de junio, tras dos años de retraso debido al COVID-19. Este breve clip lo dice todo:
Uno se llena de justa indignación viendo ese vídeo. La intervención y la determinación del obviamente molesto presidente de la iglesia, Ted Wilson, para influir en la votación en contra de incluir el tema de la vacunación a la agenda recuerda fuertemente a algo bíblico. ¿Por qué teme tanto al “pueblo” de una iglesia ostensiblemente democrática? ¿Por qué los dirigentes estaban tan decididos a sofocar este debate antes de que pudiera tener lugar, con Ted Wilson abusando descaradamente de su posición para instar a los delegados a votar de una manera determinada?
La única respuesta es... por MIEDO.
Pero los principales sacerdotes y los ancianos persuadieron a la multitud que pidiese a Barrabás, y que Jesús fuese muerto. (Mateo 27:20)
¿Por qué los principales sacerdotes querían destruir a Jesús?
Y los principales sacerdotes y los escribas buscaban cómo matarle; porque temían al pueblo. (Lucas 22:2)
A los principales sacerdotes y a los escribas no les importaba nada el pueblo, sino que lo temían. Lo que temían era que las multitudes causaran un alboroto que diera lugar a que los romanos intervinieran y posiblemente les quitaran la libertad de administrar la nación judía. Ted Wilson no se preocupa por los miembros de su iglesia en lo más mínimo—como se puede ver claramente en el clip de video anterior— pero él definitivamente no quería tener “una revuelta del pueblo” en la Sesión de la CG de alto perfil porque habría llamado la atención de los “romanos” de hoy en día que permiten que la iglesia opere bajo las protecciones del Estado, siempre y cuando se demuestre que toleran la agenda LGBT y promueven la vacuna COVID-19.[3] No es una iglesia protegida por Dios sino por el hombre: se ha prostituido a los poderes del Estado.[4]
Elena G. de White habla claramente a los que saben leer:
Dios posee una iglesia. No es una gran catedral, ni la iglesia oficial establecida, ni las diversas denominaciones; sino el pueblo que ama a Dios y guarda sus mandamientos. “Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos”. Mateo 18:20. Aunque Cristo esté aún entre unos pocos humildes, ésta es su iglesia, pues sólo la presencia del Alto y Sublime que habita la eternidad puede constituir una iglesia. Donde dos o tres que aman y obedecen los mandamientos de Dios están presentes, Jesús los preside, ya sea en un lugar desolado de la tierra, en el desierto, en la ciudad o encerrados en los muros de una prisión. La gloria de Dios ha penetrado a estas últimas, colmando de gloriosos rayos de luz celestial las oscuras mazmorras. Sus santos pueden sufrir, pero sus sufrimientos, como los apóstoles de antaño, esparcirán su fe y ganarán almas para Cristo y glorificarán su santo nombre. La más amarga oposición dirigida por los que odian la gran norma moral de justicia de Dios no deberían sacudir, ni lo harán, al alma firme que confía plenamente en Dios... {ATO 313.5-313.6}
También se puede decir: “La iglesia no es la CG”, que no es ni humilde ni son pocos, ni tiene en su seno al compasivo Jesús, que nunca rechazó a una multitud de almas sufrientes. Lo que la Iglesia Adventista del Séptimo Día ha hecho es una completa traición—traición a Jesucristo y a todo lo que la iglesia históricamente representó. ¿Por qué? Para mantener la paz con los reyes de la tierra—como las hijas de la madre ramera, como la historia ilustrativa en la Biblia de dos hermanas rameras.
Y lo vio su hermana Aholiba, y enloqueció de lujuria más que ella; y sus fornicaciones fueron más que las fornicaciones de su hermana. (Ezequiel 23:11)
Y ahora llegamos al tema de la caída de Babilonia, la madre de las rameras en el capítulo del “cuarto ángel”:
Cuanto ella se ha glorificado y ha vivido en deleites, tanto dadle de tormento y llanto; porque dice en su corazón: Yo estoy sentada como reina, y no soy viuda, y no veré llanto; por lo cual en un solo día vendrán sus plagas; muerte, llanto y hambre, y será quemada con fuego; porque poderoso es Dios el Señor, que la juzga. (Apocalipsis 18:7-8)
El significado de “un día” será revelado en una sección posterior, pero primero queremos que veas por qué se dice que Babilonia cayó en “una hora” tres veces.
Apocalipsis 18 da una pista para entender las tres menciones de “una hora” en la distinción de quién lamenta la caída de Babilonia en cada uno de estos casos. Primero, son los “reyes de la tierra” los que se lamentan del “juicio” de Babilonia:
Y los reyes de la tierra que han fornicado con ella, y con ella han vivido en deleites, llorarán y harán lamentación sobre ella, cuando vean el humo de su incendio, parándose lejos por el temor de su tormento, diciendo: ¡Ay, ay, de la gran ciudad de Babilonia, la ciudad fuerte; porque en una hora vino tu juicio! (Apocalipsis 18:9-10)
En segundo lugar, son los “mercaderes” de la tierra los que se lamentan de su pérdida de “riquezas”:
Y los mercaderes de la tierra lloran y hacen lamentación sobre ella, porque ninguno compra más sus mercaderías; mercadería de oro, de plata, de piedras preciosas, de perlas, de lino fino, de púrpura, de seda, de escarlata, de toda madera olorosa, de todo objeto de marfil, de todo objeto de madera preciosa, de cobre, de hierro y de mármol; y canela, especias aromáticas, incienso, mirra, olíbano, vino, aceite, flor de harina, trigo, bestias, ovejas, caballos y carros, y esclavos, almas de hombres. Los frutos codiciados por tu alma se apartaron de ti, y todas las cosas exquisitas y espléndidas te han faltado, y nunca más las hallarás. Los mercaderes de estas cosas, que se han enriquecido a costa de ella, se pararán lejos por el temor de su tormento, llorando y lamentando, y diciendo: ¡Ay, ay, de la gran ciudad, que estaba vestida de lino fino, de púrpura y de escarlata, y estaba adornada de oro, de piedras preciosas y de perlas! Porque en una hora han sido consumidas tantas riquezas… (De Apocalipsis 18:11-17)
Y por último, son los “marineros” de la tierra los que lamentan la “desolación” de Babilonia:
...Y todo piloto, y todos los que viajan en naves, y marineros, y todos los que trabajan en el mar, se pararon lejos; y viendo el humo de su incendio, dieron voces, diciendo: ¿Qué ciudad era semejante a esta gran ciudad? Y echaron polvo sobre sus cabezas, y dieron voces, llorando y lamentando, diciendo: ¡Ay, ay de la gran ciudad, en la cual todos los que tenían naves en el mar se habían enriquecido de sus riquezas; pues en una hora ha sido desolada! (De Apocalipsis 18:17-19)
En cada caso, es la gente del mundo la que exclama con asombro que en “una hora” han sucedido estas cosas. Al considerar el significado de la hora como una unidad de tiempo desde su perspectiva, esto no podría ser más que una expresión de lo repentino. Sin embargo, debido a que la palabra griega utilizada también puede referirse a una medida definida de tiempo, y la profecía fue dada por Dios para el beneficio del entendimiento, podríamos considerar una gran variedad de posibilidades para lo que la hora podría representar:
Podría ser una hora literal (pero esto sería poco probable)
Podría ser una hora profética (15 días)
Para los Adventistas del Gran Sábado que tienen la ventaja de varios relojes divinos, hay más opciones:
Podría ser una hora en el ciclo del juicio de Orión (7 años)[5]
Podría ser una hora en el reloj de Mazzaroth (un mes)[6]
Podría ser una hora en el reloj Horologium (un año)[7]
Incluso se podrían considerar otras formas de calcular una hora en los relojes divinos, pero la situación básica siempre caerá en uno de los dos casos a la luz de los dos últimos artículos en cuanto a la destrucción del 22 de junio de 2022: o bien Babilonia debe caer muy rápidamente (por ejemplo, una hora literal antes del 22 de junio) o bien la caída debe haber ocurrido ya, porque cualquier otra “hora” sería más larga que los pocos días que quedan hasta el 22 de junio.
Basta con echar un vistazo a los últimos titulares para decidir cuál de esos casos se está dando en la actualidad:
10 de junio de 2022 – ¡Por encima del 5%! el aumento de precios al consumidor en todos los meses, desde mayo de 2021, revela estudio
10 de junio de 2022 – La inflación en EE.UU. llegó a 8,6% en mayo y marca un máximo de cuatro décadas
Cuando los precios suben, significa que el valor del dólar—su poder adquisitivo—ha bajado. Y si el dólar—la moneda de reserva de facto del mundo—baja, significa que Babilonia está cayendo, no prosperando. Significa que la Ciudad Mundial se está empobreciendo, tal y como describe Apocalipsis 18.
Y los mercaderes de la tierra lloran y hacen lamentación sobre ella, porque ninguno compra más sus mercaderías; (Apocalipsis 18:11)
Irónicamente, lo único que no está cayendo es el rublo ruso. Parece que los esfuerzos de Occidente por sancionar a Rusia han provocado una gran demanda de rublos, ya que los oligarcas rusos se apresuran a rescatar su riqueza de la confiscación. Tal vez esto es parte de cómo Dios está dando poder a Rusia como un instrumento de juicio.
El punto es que Babilonia definitivamente está cayendo como se refleja en la economía mundial, tal como dice el capítulo 18, y las noticias definitivamente están hablando de ello ahora mismo. Entonces, si su caída se está lamentando ahora, ¿cuándo comenzó la “hora”? La clave es que su caída es una consecuencia de su fornicación con los reyes de la tierra; la Biblia dice “por lo cual” sus plagas vendrán en un día.[8] Así que para encontrar el comienzo de la hora de su caída en ese “día”, tenemos que averiguar cuando Babilonia, la Iglesia Católica (la gran ramera), cometió fornicación con los reyes de la tierra. Todo el mundo vio la respuesta:
25 de septiembre de 2015 – El papa reza en el Memorial de los atentados del 11 de septiembre en Nueva York
Fue entonces cuando las naciones entregaron su poder a la gran ramera dejándose guiar por ella. ¿Y cuál fue la naturaleza de su fornicación? ¿Cómo vivía ella en deleites con ellos? El papa Francisco insistió en su agenda de tolerancia, migración, clima y, en general, en el bien común por encima del capitalismo. En otras palabras, en lugar de dejar el dinero en manos del pueblo (capitalismo) instó a que el dinero se destinara al bien común. ¿Cómo se hace eso en la práctica? Se hace inflando la oferta monetaria, lo que hace que un mayor porcentaje de la oferta monetaria total pase a manos de las imprentas, robando así el valor de los bolsillos del pueblo y poniéndolo en manos del gobierno, una redistribución de la riqueza exactamente como pedía el papa. Sí, la impresión de dinero fue intencionada, por orden del papa. Y las naciones lo hicieron. Así como la Biblia utiliza un lenguaje fuerte en este tema, nosotros también debemos hacerlo: El Papa Francisco te ha “violado”.
Ahora resulta trivial descifrar el significado de una hora. Basta con calcular cuánto tiempo ha pasado desde 2015, cuando el papa “se acostó con” los reyes de la tierra, hasta 2022, cuando la prensa empezó a lamentar seriamente la caída de la economía mundial: han pasado siete años.
Esto es exactamente “una hora” en el ciclo de juicio de 24 horas y 168 años del reloj de Orión. El mensaje de Orión podría haber salvado al mundo si sus advertencias hubieran sido escuchadas.
Si la hora se entiende efectivamente como siete años, entonces de repente es posible hacer otra clara constatación: mirando hacia atrás otros siete años antes de 2015, uno ve otro evento que cambió al mundo, que sacudió a Babilonia: la crisis financiera de 2008. Fue entonces cuando comenzaron los grandes rescates bancarios.
El declive de la actividad económica general fue modesto al principio, pero se agudizó en el otoño de 2008 cuando las tensiones en los mercados financieros alcanzaron su punto álgido. De punta a punta, el producto interior bruto de Estados Unidos cayó un 4,3%, convirtiéndose en la recesión más profunda desde la Segunda Guerra Mundial.[9] [Traducido]
Curiosamente, los efectos de la recesión perduraron incluso hasta 2015, sobre todo en lo que respecta a la tasa de empleo. La comparecencia del papa ante la AGNU en 2015 no fue un hecho ajeno; la recesión de 2008 fue una herramienta conveniente para promover sus opiniones anticapitalistas. (Teniendo en cuenta que la crisis fue causada por una relajación de los requisitos de los préstamos y, por lo tanto, una proliferación de la deuda incobrable se podría incluso especular que la crisis fue causada a propósito).
Los rescates de aquellos años ya suscitaban preocupación por el abuso del dinero por parte del gobierno. Por eso se inventó el Bitcoin como resultado de la recesión de 2008, como una forma de dinero que no se puede inflar, y por eso se incluyó el siguiente mensaje en su Bloque Génesis:
The Times 03/Jan/2009 Canciller al borde del segundo rescate para los bancos [inglés]
Decrypt explica:
Debido al momento de su lanzamiento, además del mensaje oculto contenido en el bloque de génesis, se cree ampliamente que Bitcoin fue lanzado para proporcionar un sistema monetario alternativo diseñado para resistir los desafíos que enfrentan muchas monedas tradicionales, como la inflación, la falsificación y la corrupción. [Traducido]
En la actualidad, los mercados—incluyendo el de las criptomonedas—se están desplomando en respuesta a las elevadas estadísticas de inflación y al estrangulamiento de los inversores por el aumento de los tipos de interés en Estados Unidos y Europa. Estos mares agitados provocaron que un prestamista de criptomonedas, Celsius, congelara los retiros, desestabilizando aún más el espacio. Según Decrypt, Celsius tomaba los fondos depositados y los prestaba a tasas de interés más altos que los prometidos a sus clientes para beneficiarse de la diferencia. Al final, la avaricia puede definitivamente arruinar a cualquier empresa, y la única cobertura verdadera contra ella es vivir el principio de “Si no son tus llaves, no son tus monedas”.
Uno podría preguntarse por qué la gente no está acudiendo en masa al bitcoin en medio de este escenario inflacionario, ya que siempre se ha promocionado como una cobertura contra la inflación. Al igual que el mensaje de Orión en la esfera espiritual, el bitcoin ofreció al mundo una salida del yugo totalitario que se cierne sobre todo el mundo en la esfera financiera a través del control del dinero. En general, la humanidad no tomó la salida.
Sin embargo, independientemente del precio del bitcoin, el hecho de que el bitcoin, que fue creado en respuesta a la caída de 2008, sea considerado como una amenaza hoy en día entre las naciones y los líderes financieros muestra una vez más la progresión de la caída de Babilonia desde 2008 hasta 2015 y 2022.
¿Podría la tercera mención de una hora en Apocalipsis 18 significar un tercer período de siete años que marcaría un evento de cambio mundial que encajaría en el contexto de la caída financiera de Babilonia?
Contando de nuevo hacia atrás, se llega a 2001: el año en que las torres del World Trade Center fueron incendiadas y derribadas en Nueva York. Este fue obviamente un evento financiero y un evento que sacudió al mundo por una serie de razones. Y no fue por casualidad que se eligió un titular concreto sobre el discurso del papa en la ONU porque incluyó la nota de que él había rezado en el lugar conmemorativo del 11-S. Ese no fue sólo el lugar de un ataque terrorista, sino un sacrificio planeado para el dios del nuevo orden mundial que fue a visitar allí 14 años después.
Ahora hemos encontrado las tres horas. La única cuestión es cómo encajan los versículos bíblicos. Se puede suponer que siguen el orden bíblico. Primero, los reyes de la tierra lamentan su “incendio” en el juicio.
¿Hubo alguna nación en la tierra que no viera el humo de su incendio el 11 de septiembre?
Pero el derrumbe de las torres gemelas fue también un pretexto para la guerra que traería ganancias financieras. La operación “Libertad Iraquí” podría haberse llamado operación “Liberar el petróleo iraquí”.
El petróleo no era el único objetivo de la guerra de Irak, pero sin duda era el central, como han atestiguado altas personalidades militares y políticas estadounidenses en los años posteriores a la invasión.[10] [Traducido]
Así que, para cuando Freddie Mac y Fannie Mae fueron absorbidas por el Departamento del Tesoro de EE.UU. y Lehman Brothers se declaró en bancarrota en 2008[11] y comenzó el subsiguiente bazar de rescates, los reyes de la tierra se lamentaban definitivamente de los males económicos que habían llegado en esos siete años.
El siguiente lamento proviene de los mercaderes porque su mercancía ya no se compra.
Y los mercaderes de la tierra lloran y hacen lamentación sobre ella, porque ninguno compra más sus mercaderías;... Porque en una hora han sido consumidas tantas riquezas... (De Apocalipsis 18:11,17)
Esto es exactamente lo que ocurrió en 2015:
Las ventas minoristas vuelven a caer y terminan el 2015 con un suspiro
WASHINGTON (MarketWatch) – Las ventas en los comercios minoristas de Estados Unidos cayeron ligeramente en diciembre, ya que 2015 registró el ritmo más lento de ganancias desde 2009.[12] [Traducido]
Desde la recesión de 2008 hasta el año del discurso del papa en la AGNU, las ventas comerciales registraron sus menores ganancias. Tales fueron los lamentos de los comerciantes al final de la segunda hora, tal como dice la Biblia.
Los últimos son los marineros (o saylors) que lamentan la caída de Babilonia.
Nadie interesado en Bitcoin que esté viviendo en el presente puede dejar de saber quién es el “Saylor” que fue “enriquecido” junto con su compañía y seguidores. La Biblia utiliza un simbolismo que retrata claramente el icono de aquellos que “venden” ansiosamente el dinero fiduciario por la criptodivisa con la esperanza de cobertura contra la política de impresión de dinero perjudicial y de la inflación.
Por lo tanto, las finanzas de Michael Saylor también se examinan con frecuencia cuando el precio del bitcoin cae porque su préstamo contra el bitcoin podría ponerlo “bajo el agua” si el precio cae demasiado. Y, por supuesto, no hace falta decir que todos los que tienen ojos de láser se lamentan cuando el precio del bitcoin baja, ya que los ojos de láser representan el objetivo de alcanzar un precio del bitcoin de 100.000 dólares.
El problema para todos durante los dos últimos años ha sido que la redistribución de la riqueza sigue en marcha. La plandemia del coronavirus no sólo acabó con los recursos financieros de muchas personas, sino que también dio lugar a una mayor redistribución de la riqueza y a la inflación del dólar y otras monedas. Unas palabras para los dejados atrás: cuando por fin estés preparado para “quemar” a la ramera, hay (todavía) una forma de hacerlo, aunque sea demasiado tarde para salvar tu alma: en lugar de llorar por el patrón del oro que se abandonó en 1971, pásate al patrón bitcoin. ¡Está en tu poder hacerlo!
La caída del precio del bitcoin junto con otras criptodivisas no significa que el valor del bitcoin haya cambiado en su sentido fundamental; sigue siendo lo que es: una forma de dinero segura y sin permisos que no puede ser inflada, es decir, el papa no puede redistribuirla. Si tuviste un bitcoin ayer, sigue estando ahí para ti hoy, y ése es su valor intrínseco que no desaparecerá—un valor intrínseco que sólo se apreciará más y más a medida que los billetes de dólar sigan saliendo de la impresora de dinero como las hojas del otoño en un día de viento. Más gente tiene que avivarse y dejar de confiar en el papel higiénico verde por más que “su valor intrínseco”.
Según la Biblia, cuando veas a las diversas clases de “Saylors”(marineros) del mundo de cripto llorar y lamentarse por la desolación de sus inversiones, es hora de alegrarse, y ese momento es ahora:
Alégrate sobre ella, cielo, y vosotros, santos, apóstoles y profetas; porque Dios os ha hecho justicia en ella. (Apocalipsis 18:20).
Las advertencias han sido sonadas por los mensajeros de Dios contra la avaricia y los hechos abominables de Babilonia que llevaron al mundo a la terrible situación actual. El Señor quiere que Su pueblo sea sabio, pero contento.
Porque los que quieren enriquecerse caen en tentación y lazo, y en muchas codicias necias y dañosas, que hunden a los hombres en destrucción y perdición; porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores. Mas tú, oh hombre de Dios, huye de estas cosas, y sigue la justicia, la piedad, la fe, el amor, la paciencia, la mansedumbre. (1 Timoteo 6:9-11)
Sin embargo, el mundo no ha prestado atención a las advertencias del Señor, incluso cuando las consiguientes plagas comenzaron a ser derramadas. Han seguido adorando su oro y su plata inanimados.
y no se arrepintieron de sus homicidios, ni de sus hechicerías [griego: “pharmakeia”], ni de su fornicación, ni de sus hurtos. (Apocalipsis 9:21)
Por amor al dinero, los abortos[13] continúan en todos los Estados Unidos y en el mundo cristiano nominal, dos tercios de la población mundial han sucumbido a las pociones genéticas y farmacéuticas de la vacunación, las naciones siguen fornicando con la iglesia papal y la sexualidad desviada que promueve con el ejemplo, y los hombres siguen jugando con las riquezas de los inversores, robándolas para cubrir sus pérdidas, como lo ilustran los negocios de Celsius. La lista completa de males que han resultado de la avaricia de los hombres en las altas posiciones, sólo Dios lo sabe, pero en este versículo, se resumen en breve, y es por esta causa que Dios está juzgando al mundo precisamente donde más les duele: en su bolsillo.
La caída de Babilonia en el Apocalipsis se describe así en términos financieros, y ahora que tenemos una imagen clara de los marcos de tiempo de “una hora” involucrados, volvamos a la llegada de sus plagas en “un día” en Apocalipsis 18. Hay varias cosas que podemos contrastar en estos versículos en comparación con las tres menciones de una hora, no siendo la menor de ellas quién pronuncia las palabras con el marco de tiempo:
Y oí otra voz del cielo, que decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas; porque sus pecados han llegado hasta el cielo, y Dios se ha acordado de sus maldades. Dadle a ella como ella os ha dado, y pagadle doble según sus obras; en el cáliz en que ella preparó bebida, preparadle a ella el doble. Cuanto ella se ha glorificado y ha vivido en deleites, tanto dadle de tormento y llanto; porque dice en su corazón: Yo estoy sentada como reina, y no soy viuda, y no veré llanto; por lo cual en un solo día vendrán sus plagas; muerte, llanto y hambre, y será quemada con fuego; porque poderoso es Dios el Señor, que la juzga. (Apocalipsis 18:4-8)
Es Jesucristo quien advierte de la necesidad de huir de Babilonia, diciendo “pueblo mío” en este versículo, y por lo tanto es el Señor quien dice que las plagas de Babilonia vienen en un día. En cambio, son los diversos reyes, mercaderes y marineros los que lamentan su caída en tres horas. Sin embargo, esas horas quedaron registradas en la palabra profética, y pudimos descifrarlas según la duración de una hora en el reloj de Orión, un reloj que representaba el ministerio de intercesión de Jesús por Su pueblo.
Si Jesús habla directamente de un día, entonces también debe ser un día desde Su perspectiva, es decir, un día medido en uno de Sus relojes. Si debe entenderse como un día en el reloj de Orión, entonces estaríamos tratando con 168 años, lo cual está un poco fuera de rango desde nuestra perspectiva, ya que Babilonia no ha sido plagada por tanto tiempo. Sin embargo, si consideramos un día en el reloj Horologium—que también representa a Jesús, pero en Su papel de rey cuando derrama el juicio de las plagas—llegamos a algo interesante. La forma en que la esfera del Reloj de péndulo indica un año por cada hora fue explicada en el primer artículo de la serie Aquí viene el Esposo, titulado La vara de hierro, un día consta de doce horas.
Respondió Jesús: ¿No tiene el día doce horas? El que anda de día, no tropieza, porque ve la luz de este mundo; (Juan 11:9)
Doce horas del día en un reloj donde cada hora representa un año, da como resultado doce años: el tiempo transcurrido desde la publicación de la presentación de Orión en 2010 hasta el año actual, 2022. El mensaje salió del Señor que está en Orión, y llamó a Su pueblo a salir de Babilonia para que no participaran de sus pecados ni recibieran sus plagas que iban a venir en este “un solo día”. Ahora ese día ha terminado.
Pero este cálculo tiene otra faceta: Bíblicamente hablando, un día completo comienza primero con la tarde (noche), que también consta de doce horas, y luego la mañana (día) Si incluimos la noche en el “un solo día” del juicio de Babilonia, se llega al año 1998 como el comienzo mismo del “día de 24 horas”. Fue a principios de la primavera de 1999[14] cuando John Scotram, el instrumento que Dios utilizaría para compartir el mensaje de Orión con el mundo, hizo su pacto personal con Dios después de que 1998 pasara como el año más oscuro de su vida, cuando tocó fondo, habiendo perdido su empresa y todo el apoyo humano y financiero.
El Señor ve a todos los individuos que son atacados, y el mensaje de Orión representa Su capacidad para alcanzar y levantar el alma quebrantada, caída bajo el yugo de hierro de Babilonia. Dios se está vengando de Babilonia por lo que ha hecho a sus mensajeros, como se afirma al final de las tres horas:
Por lo tanto, el “un solo día” del juicio de Babilonia comenzó primero (en 1998) y abarca los 21 años completos de las tres horas de Orión de la caída de Babilonia (de 2001 a 2022), como se podría esperar del escenario bíblico, donde el día se menciona primero.
Apocalipsis 18 se ha cumplido casi por completo. Hemos visto el humo de su incendio, al igual que los muchos otros que “se pararon lejos” mientras lamentaban sus catástrofes financieras de 2001-2008, 2008-2015 y 2015-2022. Pero tras las lamentaciones de estas horas y la orden de regocijarse a causa de esto está el mensaje del ángel con la piedra de molino:
Y un ángel poderoso tomó una piedra, como una gran piedra de molino, y la arrojó en el mar, diciendo: Con el mismo ímpetu será derribada Babilonia, la gran ciudad, y nunca más será hallada. (Apocalipsis 18:21)
Como una piedra de molino arrojada en el mar por la fe, la erupción de Hunga Tonga causó una explosión con cualidades que los habitantes de la tierra nunca habían presenciado en la historia registrada.
Sin embargo, la piedra de molino tiene un significado más profundo. El texto se refiere a una piedra que es “como” una piedra de molino, sugiriendo una comparación con las características de una piedra de molino. Por ejemplo, se hace referencia a las piedras de molino por su color característico:
La piedra de molino es de un color cremoso y neutro con matices amarillos, perfecto para los accesorios del hogar o los armarios. (Según Google) [Traducido]
¿Podrían los matices “amarillos” sugerir algún tipo de “piedra amarilla” a la que se refiere esta profecía en relación con la impetuosa caída de Babilonia? Sucede que, en el momento de escribir este artículo, la prensa está llena de historias sobre el Parque Nacional de Yellowstone:
Inundaciones sin precedentes obligan al Parque Nacional de Yellowstone a cerrar todas sus entradas y dejar a los lugareños atrapados
Muchas piedras de molino—sobre todo las romanas—se fabricaban incluso con roca ígnea, es decir, con roca formada por lava volcánica.[15] Esto parece redoblar la idea de que Dios eligió deliberadamente un simbolismo que apunta al “ímpetu” de una erupción volcánica del Parque Nacional de Yellowstone como la descripción más adecuada de la caída y la aniquilación total de Babilonia: “nunca más será hallada”. La erupción del Hunga Tonga enseñó al mundo que cuando el agua se combina con un volcán en erupción, el resultado es una “violencia” extrema— ¡imagina combinar ese tipo de violencia con un súper volcán que normalmente no se inunda de agua! Esto sugiere un escenario mucho peor de lo previsto.[16]
Bíblicamente, el azufre ardiente, por el que Yellowstone recibe su nombre, representa la condenación eterna, que Dios advirtió que era la consecuencia de ser herido por los colmillos de las vacunas genéticamente manipuladas, que el mundo fue engañado en recibir. (¿Acaso no dijo Jesús: “Mirad que no seáis engañados”[17] por falsos salvadores?) ¿Qué tan apropiado sería, entonces, que Dios se vengara de tal engaño maligno usando los mismos símbolos: fuego y azufre amarillo?
La referencia a una piedra “como” una piedra de molino en este contexto de la caída de Babilonia también trae a la memoria la profecía dada a Nabucodonosor en un sueño:
Estabas mirando, hasta que una piedra fue cortada, no con mano, e hirió a la imagen en sus pies de hierro y de barro cocido, y los desmenuzó. Entonces fueron desmenuzados también el hierro, el barro cocido, el bronce, la plata y el oro, y fueron como tamo de las eras del verano, y se los llevó el viento sin que de ellos quedara rastro alguno. Mas la piedra que hirió a la imagen fue hecha un gran monte que llenó toda la tierra. (Daniel 2:34-35)
En este sueño, se utiliza un lenguaje muy similar para describir el hecho de que Babilonia desaparecerá por completo: “sin que de ellos quedara rastro alguno”. Más bien, el reino eterno de Dios se establecerá en su lugar, por lo que los justos podrán alegrarse de todo corazón, ¡a pesar de cualquier molestia presente! ¡Que suene la séptima trompeta!
El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos. (Apocalipsis 11:15)
La erupción del Hunga Tonga ha estimulado un intenso estudio bíblico durante los últimos seis meses, que resulta en el descubrimiento del arca del pacto en el cielo, que es el fundamento del reino de Cristo:
Y el templo de Dios fue abierto en el cielo, y el arca de su pacto se veía en el templo. Y hubo relámpagos, voces, truenos, un terremoto y grande granizo. (Apocalipsis 11:19)
Esa escena final de la séptima trompeta es simultanea con los versículos finales de Apocalipsis 18:
Y voz de arpistas, de músicos, de flautistas y de trompeteros no se oirá más en ti; y ningún artífice de oficio alguno se hallará más en ti, ni ruido de molino se oirá más en ti. Luz de lámpara no alumbrará más en ti, ni voz de esposo y de esposa se oirá más en ti;.... (De Apocalipsis 18:22-23)
Ese pronóstico ominoso indica que no quedará nada bueno en Babilonia. No habrá solucionadores de misterios divinos (arpistas), ni alabanzas a Dios (de músicos y flautistas[18]), ni advertencias de Dios (de trompeteros), ni artesanos que construyan para Dios (como los constructores del arca del pacto), ni grano bueno que se refine (el sonido de una piedra de molino), ni iglesias fieles (la luz de una lámpara[19]), ni el testimonio del Espíritu de Jesús (el Esposo), ni Su esposa: todo lo que es bueno y noble y que vale la pena esperar y anhelar ya no estará al alcance de Babilonia. En pocas palabras, significa que el rapto probablemente ha sucedido.
Como se ha mostrado en las secciones anteriores, estamos actualmente entre los versículos 21 y 22 en el flujo de Apocalipsis 18—posiblemente al borde del rapto—y la línea divisoria entre esos versículos parece estar alineándose con el 21 y 22 de junio, de acuerdo con la forma en que se ha explicado el potencial rapto en los dos artículos anteriores.
Cuando publicamos nuestro aviso sobre el 22 de junio, no reconocimos lo “simbólica” que era esta fecha para el mundo. Era el Señor quien nos había guiado para entender los tiempos, con tres semanas y media de antelación; no sabíamos lo que RT aparentemente sí sabía, al menos para cuando publicaron el siguiente titular al final de nuestra segunda semana de advertencias:
Ucrania recibirá armas pesadas alemanas en una fecha simbólica
Kiev recibirá armas pesadas de Alemania el día en que los nazis atacaron a la URSS, según el embajador ucraniano Andrey Melnyk[20]
¿Será que el simbolismo de la erupción del súper volcán de Yellowstone es sólo una figura de lo que le ocurrirá a Babilonia por invención del hombre? ¿O es que Dios se adelantará a las obras del hombre utilizando Sus propios medios? No importa. El mensaje es claro de cualquier manera ya que los efectos serían similares, y Dios da una amplia advertencia en todos los frentes. Nadie tiene excusa.
Ya sea que Yellowstone explote o que las bombas nucleares vuelen, de cualquier manera la segunda bestia de Apocalipsis 13 será el epicentro de la devastación. Entonces no habrá duda de que Dios ha castigado a los Estados Unidos de América (con consecuencias nefastas para todo el mundo) por su fornicación con la primera bestia,[21] siguiendo su agenda no tan secreta LGBT y de vacunación.
En cualquier caso, el cese de la “piedra de molino”, si también se refiere a Yellowstone, da otra capa de significado a los versículos 22-23:
No sólo Yellowstone ha cerrado sus puertas debido a la inundación por un período de tiempo desconocido, sino que todo el parque también sería inexistente después de una erupción. Una erupción de este tipo (ve una simulación) también esparciría tanta ceniza que la tierra quedaría en una espesa oscuridad, de modo que ni siquiera una vela proporcionaría luz, como ocurrió en Egipto.
Jehová dijo a Moisés: Extiende tu mano hacia el cielo, para que haya tinieblas sobre la tierra de Egipto, tanto que cualquiera las palpe. Y extendió Moisés su mano hacia el cielo, y hubo densas tinieblas sobre toda la tierra de Egipto, por tres días. Ninguno vio a su prójimo, ni nadie se levantó de su lugar en tres días; mas todos los hijos de Israel tenían luz en sus habitaciones. (Éxodo 10:21-23)
La luz en las moradas de los hijos de Israel simbolizaría así la luz de la esperanza de la venida de Cristo que atravesará la espesa oscuridad. Así, los símbolos que comienzan con la piedra de molino, pasando por las tinieblas, y finalmente la venida de Jesús como el Esposo, nos hablan de la última cadena de acontecimientos que conducen al rapto, cuando la novia también será tomada.
Volviendo a los cielos, el Señor nos da una indicación de dónde estamos en el tiempo al mostrarnos el sonido de la trompeta por Venus:
El sonido (Venus), que entró silenciosamente en la trompeta como el aliento del trompetista el 4 de mayo, sale ruidosamente del cuerno de la trompeta el 17 de junio y señala así una serie de cosas que presentaremos en el próximo artículo. La forma en que esta señal de la trompeta fue formada por el cometa PanSTARRS y cómo es soplada por varios cuerpos celestes ha sido explicada en el curso de nuestras Observaciones finales, particularmente en Cruzando el umbral y Tocando la trompeta.
Sólo por la consideración de la fecha de esta trompeta, el 17 de junio, se podría adivinar que significa el comienzo de la catástrofe simbolizada por la violenta piedra de molino, y por tanto el comienzo de los tres días de oscuridad hasta que se vea la primera luz del regreso de Cristo. Sólo los israelitas tenían luz en su morada; la oscuridad de la erupción de un súper volcán o las pesadas nubes radiactivas de una guerra nuclear durarían mucho más que tres días, pero se promete un lugar claro de persistente esplendor para los santos.
Dios escogió la media noche para libertar a su pueblo. Mientras los malvados se burlaban en derredor de ellos, apareció de pronto el sol con toda su refulgencia y la luna se paró. Los impíos se asombraron de aquel espectáculo, al paso que los santos contemplaban con solemne júbilo aquella señal de su liberación. En rápida sucesión se produjeron señales y prodigios. Todo parecía haberse desquiciado. Cesaron de fluir los ríos. Aparecieron densas y tenebrosas nubes que entrechocaban unas con otras. Pero había un claro de persistente esplendor de donde salía la voz de Dios como el sonido de muchas aguas estremeciendo los cielos y la tierra. Sobrevino un tremendo terremoto. Abriéronse los sepulcros y los que habían muerto teniendo fe en el mensaje del tercer ángel y guardando el sábado se levantaron, glorificados, de sus polvorientos lechos para escuchar el pacto de paz que Dios iba a hacer con quienes habían observado su ley. {PE 285.1}
Cuando leas esto, sabrás por ti mismo lo que los días habrán traído. Agárrate fuerte de la mano del Señor y no la sueltes. Pero tal vez el significado más importante de este sonido de trompeta es uno espiritual: señala la consumación del misterio de Dios.
sino que en los días de la voz del séptimo ángel, cuando él comience a tocar la trompeta, el misterio de Dios se consumará, como él lo anunció a sus siervos los profetas. (Apocalipsis 10:7)
Esto tiene un profundo significado y dice, entre otras cosas, que la voz de Dios como muchas aguas ha sido entendida. Significa que las profecías han sido descifradas correctamente y que el tiempo del regreso de Cristo ha sido anunciado. Esto es lo que siempre ha representado la voz de Dios desde Orión; a esto se refiere Elena de White en la cita anterior.
El arrebatamiento durante la segunda venida en medio de la gran catástrofe aclara por qué el capítulo 19 comienza con los santos regocijándose en el cielo, habiendo ya presenciado el humo del incendio de Babilonia.
Después de esto oí una gran voz de gran multitud en el cielo, que decía: ¡Aleluya! Salvación y honra y gloria y poder son del Señor Dios nuestro; porque sus juicios son verdaderos y justos; pues ha juzgado a la gran ramera que ha corrompido a la tierra con su fornicación, y ha vengado la sangre de sus siervos de la mano de ella. Otra vez dijeron: ¡Aleluya! Y el humo de ella sube por los siglos de los siglos. (Apocalipsis 19:1-3)
La naturaleza eterna de los juicios de Babilonia es enfatizada por el Apocalipsis. No hay una segunda oportunidad; no hay más misericordia para el desviado. Las llamadas al arrepentimiento son silenciadas para siempre y el Espíritu de Dios, a través del cual es posible el arrepentimiento, es retirado.
Finalmente, Apocalipsis 18 da la razón de por qué Dios quita a Su pueblo de este mundo:
...porque tus mercaderes eran los grandes de la tierra; pues por tus hechicerías fueron engañadas todas las naciones. (De Apocalipsis 18:23)
Esta palabra “hechicerías” se reconoce mejor hoy en día del griego
pharmakeia
De G5332; medicamento (“farmacia”), es decir, (por extensión) magia (literal o figurada): - hechicería, brujería.
Es la industria farmacéutica la que ha sido comandada por los “mercaderes y grandes hombres” como Bill Gates para violar el propio código de la vida que Dios puso en el cuerpo humano. Este es un crimen tan grande que Dios acaba con el mundo a causa de él. Y sin embargo, ¡cuántos líderes eclesiásticos ni siquiera le dan importancia, sino que incluso lo promueven! ¡MALDITOS SEAN![22]
Cuando el humo se eleve, los fieles sabrán—como Abraham—que ni siquiera se encontraron “diez” justos. Toda la negociación de Abraham fue en vano—pero su intercesión NO fue en vano, porque Dios tuvo compasión de Lot por causa de Abraham y lo libró de la destrucción.
Y miró hacia Sodoma y Gomorra, y hacia toda la tierra de aquella llanura miró; y he aquí que el humo subía de la tierra como el humo de un horno. Así, cuando destruyó Dios las ciudades de la llanura, Dios se acordó de Abraham, y envió fuera a Lot de en medio de la destrucción, al asolar las ciudades donde Lot estaba. (Génesis 19:28-29)
Que los representados por “Lot” hoy también sean salvados en medio de la destrucción, cuando Dios lleve a Su pueblo hacia Él como un tizón arrebatado del incendio. En cuanto a los que se quedan atrás, sin haberse arrepentido de abrazar obstinadamente a la ramera contra toda cordura, sólo hay un camino suicida: el del ciego Sansón.
Y dijo Sansón: Muera yo con los filisteos. Entonces se inclinó con toda su fuerza, y cayó la casa sobre los principales, y sobre todo el pueblo que estaba en ella. Y los que mató al morir fueron muchos más que los que había matado durante su vida (Jueces 16:30)
Este artículo presentó la inconfundible evidencia de la caída de Babilonia—evidencia tan clara con respecto a los tres períodos de siete años marcados por los mayores cambios financieros y sociales de nuestro tiempo, que incluso un escéptico no podría negar la importancia de esos eventos: El 11 de septiembre de 2001, la Gran Recesión de 2008, el papa en suelo estadounidense poco después de que la ley nacional de sodomía fuera ordenada, dirigiéndose a las cámaras conjuntas del Congreso de los Estados Unidos y a todas las naciones del mundo en 2015, y el giro de los acontecimientos ahora en 2022 que hablan por sí mismos. Estos son puntos de referencia que cumplen perfectamente la descripción de la caída de Babilonia en Apocalipsis 18.
En el momento en que este artículo habrá sido publicado, la tercera semana de nuestros avisos prominentes en el sitio web (abajo) también habrá terminado, y nuestro último aviso para la semana final que se va a cortar será publicado. El aviso completo de cuatro semanas en forma acumulativa ha sido el siguiente:
A través del Arca del pacto en el cielo, ha sido revelado que el 22 de junio de 2022, la ira de Dios sin mezcla caerá sobre la tierra. Ciertas cosas sucederán que acortarán el mes de junio. Mientras se desarrollan los eventos de esta semana, que todo el pueblo de Dios esté en oración para mantenerse digno y no perder la corona de la vida eterna. Pidan la guía del Espíritu Santo para el equipo editorial para la preparación de un artículo que explicará por qué y cómo se llegó a esta conclusión. Con este anuncio, gritamos en victoria por el desmoronamiento de los muros de Babilonia y damos gracias por cómo el Señor nos está guiando cada día.
Mientras se desarrollan los eventos de esta semana, que cada uno ore por protección. Oremos para que Dios fortalezca a Su pueblo con un anticipo de la recompensa eterna en este tiempo decisivo, mientras el péndulo del tiempo oscila hacia la destrucción. Se nos ha dicho que preparemos nuestros corazones. Algunos que no sobrevivan a ciertos eventos se habrán preparado. La mayoría no se habrá preparado. ¡Ora para que estés entre los fieles!
A medida que los eventos de esta semana se desarrollan, oren para que los críticos de los mensajes de la verdad de Dios sean silenciados y su influencia caiga impotente. Oren para que el pueblo de Dios vea que Babilonia ha caído y sea fortalecido en este tiempo antes de que la destrucción sea ordenada.
Que Dios esté con cada uno de ustedes esta semana. Agárrense de la mano de Jesús y oren en Su nombre. Si somos fieles, se nos ha dicho que Dios estará con nosotros en todas nuestras pruebas. Si es necesario, pidan la ayuda de los ángeles de Dios. Manténganse fuertes y oren sin cesar mientras se desarrollan los acontecimientos de esta semana.
Moldeemos nuestro carácter para que sea como Jesús, de modo que, pase lo que pase, estemos preparados cada día para Su regreso.
Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas. Puesto que todas estas cosas han de ser deshechas, ¡cómo no debéis vosotros andar en santa y piadosa manera de vivir, (2 Pedro 3:10-11)
—Equipo editorial de Granja Nube Blanca
¿Quiénes somos nosotros? ¿Y con qué autoridad damos el aviso anterior y compartimos las ideas contenidas en este y todos nuestros artículos? Esa historia será el cumplimiento profético descrito en el próximo artículo, ¡si es que queda tiempo para publicarlo!
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